La ULPGC pagará los Sexenios de Transferencia con efectos retroactivos

Después de mucha presión del propio profesorado afectado y de los sindicatos, que hemos amenazado con reclamarlo judicialmente, la ULPGC se ha comprometido a pagar los Sexenios de Transferencia con efectos retroactivos

Desde el pasado mes de mayo ya alertamos de la negativa de la ULPGC para dar a los Sexenios de 
Transferencia el mismo trato que a los de Investigación. Y literalmente dijimos: ante "los impedimentos y obstáculos para la aplicación de los efectos de los Sexenios de transferencia, CCOO está impulsando la intervención de la Junta del PDI funcionario (JPDI) y el Comité de Empresa del PDI laboral para que supervisen y, en su caso, negocien el correcto reconocimiento pleno de estos méritos de investigación. Puesto que la normativa es clara y así lo han entendido la inmensa mayoría de las universidades. La normativa por la que se ha generado y convocado los sexenios de transferencia enmarca estos nítidamente en el ámbito de la evaluación de la investigación. Es por ello que no existen motivos para dudar al respecto."

Durante todo este tiempo, además, los propios profesores y profesoras afectados/as han estado presionando, entrevistándose con miembros del equipo rectoral e incluso denunciando públicamente el problema al mismo tiempo que los sindicatos también exigíamos una solución y preparábamos a nuestros Servicios Jurídicos sindicales para interponer demandas judiciales. En el caso de CCOO, esa exigencia la hemos planteado a través del máximo responsable de nuestra Federación de Enseñanza en Canarias, José Ramón Barroso como Secretario General de la FECCOO, quién el pasado 21 de septiembre pidió una entrevista con el Rector para desbloquear diversos temas y uno de los principales era el reconocimiento pleno de los Sexenios de Transferencia [clic en la imagen de la izquierda para ampliar el escrito de CCOO].

Y por fin, cuatro meses después, el trabajo ha dado sus frutos y el Rector se ha visto obligado a aceptar esa realidad. Anunciándolo durante la última sesión del Claustro celebrado telemáticamente.

Es evidente que la transferencia del conocimiento es una función social fundamental de la universidad, que debe promoverse en la mayor medida posible, dado que la universidad española no esta particularmente bien situada en la transferencia del saber hacia nuestra sociedad. Debe asimismo subrayarse que la evaluación de los sexenios de transferencia se ha realizado con un nivel de exigencia muy elevado y el presentarse a la misma ha comportado un esfuerzo añadido relevante a la parte del PDI que ha podido presentarse. 

Desde CCOO hemos sido y somos críticos con los modelos de uso de medición de la actividad docente e investigadora, por entender que implican una sobrecarga de la actividad burocrática del PDI y no siempre responden adecuadamente a sus fines. Pero lo que en ningún caso puede ocurrir es que una vez planteados los mismos y superada dicha evaluación positivamente, algunas universidades no cumplan con los incentivos que la propia normativa reconoce.